El discurso de odio y racismo que vienen lanzando cada vez con mayor intensidad algunos partidos políticos y organismos antiinmigrantes en España y del que en la mayoría de los casos suelen salir impunes es, a nuestro juicio, uno de los motivos instigadores del crimen que se cobró la vida del joven Younes Bilal de origen marroquí en el pueblo de Puerto de Mazarrón, Murcia.
El crimen que tuvo lugar cuando un ciudadano español, tras un ataque verbal en un café, disparó a bocajarro al joven Younes Bilal, mientras profería insultos racistas como “muerte a los marroquíes”, algo que está penado por la ley española y que contradice los valores europeos basados la convivencia y el respeto mutuo.
El derecho a la vida es el primer y más importante derecho garantizado en todas las constituciones y tratados internacionales, y como consideramos que tal delito viola el principio de convivencia y genera un aumento del odio y el miedo, queremos destacar la responsabilidad del Estado español en implicarse a la hora de afrontar y detener cuanto antes el fenómeno del racismo y el odio.
Todo ello, en un momento en que una serie de acontecimientos confirman que se está produciendo un aumento peligroso, tanto en España como a nivel europeo, suscitando una gran preocupación por el futuro de los ciudadanos de origen árabe en general.
Desde ADF Internacional condenamos firmemente todos los ataques de carácter racista y reiteramos nuestra advertencia contra el creciente fenómeno de odio contra los inmigrantes y todas las minorías que viven en Europa, independientemente de si el origen de éste sea racial, religioso o de otra índole.
Departamento de Europa y Asia Central
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